Se avisto un ejemplar de cocodrilo en la playa de Las Glorias. Piden al público no molestarlos ya que son inofensivos.
Personas avistaron a un ejemplar de cocodrilo de mediano tamaño en la playa de Las Glorias, una situación que generó temor y alertó a los bañistas y huéspedes de los hoteles en la zona.
Al instante, las personas guardaron su distancia y observaron al animal en el agua, que nadaba muy tranquilamente. Alguien llamó a Protección Civil, señaló Omar García, un bañista local que atestiguó la escena, sin embargo, él no vio llegar a los agentes de la dependencia para tomar cartas en el asunto.
Los cocodrilos se desplazan sobre el mar para encontrar un lugar donde descansar
Cabe mencionar que los cocodrilos son animales que, especialmente en la época de lluvias, aprovechan la crecida de ríos y el aumento en nivel de lagunas y canales para desplazarse a territorios menos saturados de ejemplares de su misma especie, pues son animales muy territoriales.
Muy seguido, utilizan el mar para moverse de un cuerpo de agua a otro, pues el cocodrilo acutus o americano, especie que habita Puerto Vallarta, es tolerante al agua salada.
Los biólogos y autoridades recomiendan no acercarse a estos reptiles a una distancia menor a los 3 metros, ya que no atacan seres humanos, siempre que no se sientan agredidos. Estos reptiles solo cazan en agua o en las márgenes de ríos y estanques, pero jamás persiguen presas en tierra.
En este caso, señala el biólogo Jaime Torres, experto cuidador de cocodrilos en El Salado, algunos ejemplares fueron arrastrados al mar por la fuerte crecida del río Ameca en días anteriores por las lluvias, y se encuentran cansados buscando un estero para refugiarse.
Por lo que si se les encuentra en las playas, únicamente están recuperando energías para seguir su camino a un hábitat propio.
“No somos parte de su dieta (los humanos), muchas veces las playas son el sitio adecuado para que descansen, pero buscan un estero para refugiarse”, señaló.
Cerca de la playa en la zona de Las Glorias, hay un canal de agua que desemboca en el mar, junto a algunos hoteles, donde probablemente algún cocodrilo podría acomodarse. Así mismo, del lado contrario está el canal de Los Tules, con presencia de peces, aves y mamíferos que los cocodrilos pueden cazar.
Fuente: Vallarta Opina. Artículo original