De los hacedores de lluvia a la guerra climática: la historia secreta de la manipulación de la naturaleza

Durante décadas, la modificación climática fue descartada como una teoría conspirativa. Ahora es un fenómeno global y se está convirtiendo en una auténtica guerra climática.

He aquí los capítulos más relevantes de esta historia.

Los primeros experimentos se remontan a la década de 1900 y a Charles M. Hatfield, el «hacedor de lluvia».
El interés del Gobierno y del ejército aumentó durante la Guerra Fría. Incluso la película de animación de Walt Disney «Ojos en el espacio exterior», de 1959, promocionaba los satélites como herramientas para controlar el clima o como red de defensa.
El físico teórico estadounidense Dr. Michio Kaku afirmó en 2023 que el Gobierno de EE. UU. y la CIA utilizaron la guerra climática durante la guerra de Vietnam en la década de 1960 para destruir las líneas de suministro del enemigo.
El control climático se institucionalizó en la década de 2000, cuando un taller del Departamento de Seguridad Nacional sobre modificación de huracanes exploró formas de dirigir los huracanes en nombre de la «seguridad nacional».
El documental What in the World Are They Spraying? (¿Qué están rociando en el mundo?) de 2010 afirma que las estelas de condensación son vertidos químicos deliberados para el control del clima y experimentos con la población.
El vídeo «Cloud Machine» (Máquina de nubes) de la NASA se hizo viral en 2010, cuando el presentador Jeremy Clarkson filmó una prueba de cohetes de la NASA, lo que desató especulaciones en Internet sobre la manipulación secreta del clima.
El ex piloto comercial Jeff Nelson afirmó en 2014 que las estelas de condensación observadas en los aviones no son naturales, y que probablemente estén relacionadas con la modificación del clima.
La geoingeniería fue impulsada con entusiasmo por el asesor e investigador de Bill Gates, David Keith, en 2013, con el objetivo aparente de hacer frente al engaño del «cambio climático».
El profesor Alan Robock, de la Universidad de Rutgers, advirtió que el interés de la CIA por las nubes estratosféricas podría utilizarse con fines bélicos.
«Crear nubes en la estratosfera tendría un efecto global», afirmó.
La tecnología moderna ha llevado al menos a ocho estados de EE. UU. a practicar la modificación climática, afirma el Dr. Michio Kaku.
En medio del auge actual de la siembra de nubes, la meteoróloga Ginger Zee advirtió en 2023 que 10 estados de EE. UU. utilizan ahora yoduro de plata.
La exingeniera militar Kristen Meghan Kelly, que denunció estos hechos, afirmó en la década de 2020 que «toneladas» de óxidos y sulfatos tóxicos sin marcar almacenados en bases del ejército estaban relacionados con la geoingeniería.
Existe incluso un mapa mundial de modificación climática (lanzado en 2021) que recoge más de 1700 proyectos en más de 100 países.
La gente ha estado luchando contra ello, experimentando con contramedidas caseras que utilizan desde tubos de cobre hasta «cloudbusters» contra el clima artificial.