El peso mexicano cerró el 20 de enero en 18,64 unidades por dólar, la mejor cotización de la moneda frente a la divisa estadounidense desde octubre de 2018, en medio de un feriado en el vecino del norte y al disiparse las tensiones comerciales internacionales, según el informe de jornada de un banco privado local.
«En enero el peso se ha apreciado significativamente debido a que las dos principales fuentes de incertidumbre se han aclarado», una de ellas la negociación del Tratado México, EEUU, Canadá (T-MEC) de libre comercio, dijo el Grupo Financiero Banco Base en un informe a sus clientes.
El primer factor internacional es «la firma de la fase uno del acuerdo comercial entre EEU y China, considerado como el primer paso para concluir la guerra comercial, y la ratificación del T-MEC en EEUU».
Una segunda fuente de incertidumbre se disipó en los mercados estadounidenses ya que «las apuestas en el Mercado de Futuros de Chicago también favorecen al peso mexicano, ya que alcanzaron un nuevo máximo en registro de 165.640 contratos, cada uno de 500.000 pesos (mexicanos)».
Banco Base prevé que el aumento en la especulación a favor del peso «tiene la capacidad de llevar al tipo de cambio a 18,57», lo cual representaría una apreciación mensual de 1,8% con respecto al cierre de diciembre.
Contemplando que el tipo de cambio cerró el 2019 en un nivel de 18,92 pesos por dólar y tomando en cuenta los movimientos que ha observado en los últimos 10 años la cotización de la moneda nacional, «la paridad peso-dólar podría ubicarse en este mes de enero en 18,78 pesos por dólar», adelanta el informe financiero.
Asimismo, existen múltiples riesgos que pueden provocar depreciaciones en el peso y el regreso de la volatilidad.
Entre los riesgos externos los analistas encuentran «una desaceleración del crecimiento económico de EEUU, la mayor percepción de riesgo global y la posibilidad de nuevas medidas proteccionistas».
Entre los principales riesgos internos detallan la aplicación de políticas financieras «no ortodoxas», un «ambiente hostil hacia los negocios», posibilidad de cambios fiscales, menor confianza empresarial y de los consumidores, o la situación de la estatal Petróleos mexicanos.
Fuente: Sputnik. Artículo original