La presentación de cuerpos no humanos en una audiencia en el Congreso mexicano fue recibida con escepticismo y polémica. Un grupo de fiscales peruanos salió a denunciar que los cuerpos son un fraude de cartón pintado. Otros amenazaron con una denuncia penal por el “robo de las momias”. Una reunión de académicos de la UNAM descalificó al evento tildándolo de “fechoría” de un charlatán profesional. Algunos lo interpretaron como otro capítulo del goteo noticioso tendiente a crear el escenario para la “invasión extraterrestre”.
Pero la realidad parece ser más compleja: todo apunta a que los cuerpos son reales. Aunque no necesariamente prueba su origen extraterrestre, es una evidencia física de la existencia de especies humanoides no registradas hasta ahora. “Esta es la noticia más importante de la historia, y obligaría a reescribir la historia de la Humanidad”, opina un investigador sobre el tema.
El incidente es una muestra elocuente de la poca seriedad de las instituciones académicas, judiciales y culturales, que por motivos desconocidos, crean incertidumbre y confusión en torno a hechos que podrían ser fácilmente verificables.
Historia de las momias de Nazca
Los cuerpos biológicos o “momias de Nazca” fueron descubiertos en 2015. Se trata de cuerpos de entre 1.000 y 7.000 años de antigüedad, de tres dedos, ovíparos, momificados naturalmente por hallarse en una mina de diatomeas. Algunos poseen unos enigmáticos implantes metálicos internos.
El investigador Josep Pamies en su canal de Telegram realiza un pormenorizado informe:
- A finales de 2015 se halló en la zona peruana de Nazca el cadáver de un ser de 1,70 m de altura, torso estrecho y aspecto muy extraño así como 20 pequeños cadáveres que parecían momificados con una morfología aún más sorprendente, de tipo reptiliano. Eran de muy baja estatura (unos 60 cm), cráneos anormalmente grandes y alargados, grandes cuencas oculares, fosas nasales y bocas pequeñas (se cree que deglutían en lugar de masticar), posible cuello retráctil, entre 14 y 16 costillas y, finalmente, manos y pies tridáctilos (solo tres largos dedos)… Quienes los descubrieron infirieron que no podían ser humanos y así lo comunicaron, hecho ante lo cual las principales autoridades antropológicas, arqueológicas, médicas, educativas, políticas y medios de comunicación desmintieron inmediatamente la tesis y la ridiculizaron… ¡sin haber estudiado siquiera las “momias”! Es más, algunos de los expertos que se pronunciaron llegaron a decir que probablemente se trataba de momias precolombinas modificadas con fines comerciales y otros que eran “creaciones fabricadas con huesos de animales y humanos unidos con pegamento sintético y que estos, a su vez, habían sido cubiertos por una mezcla de fibras vegetales y adhesivos sintéticos para simular un tipo de piel”.
- En 2017 el Instituto Peruano de Estudios Históricos & Investigaciones Arqueológicas Inkarri de Cuzco haría los primeros análisis, que fueron trasladados al Ministerio de Cultura de Perú para que éste fuera consciente de la importancia del hallazgo. Pero su respuesta fue acosarles de múltiples maneras, como denunció el periodista peruano Jois Mantilla.
- La polémica duró varios años hasta que en 2019 los restos fueron depositados en la Universidad San Luis Gonzaga de Ica que, desde entonces, lo tiene en su poder. A partir de ese momento hubo varios intentos de confiscarlos -llevando incluso policías- pero la universidad lo impidió hasta que en enero de 2022 el Ministerio de Cultura publicó una Resolución Directoral (N° 00001-2022) reconociendo su valor cultural y comprometiéndose a protegerlas durante al menos 2 años.
- A partir de 2019 los cuerpos fueron objeto de estudio por científicos de muy diversas disciplinas y distintos países siendo sometidos a numerosos análisis forenses con peritaje criministalístico, físico, histológico, fisiológico, biológico, genético e incluso bioinformático y de implantes metálicos usándose para ello analíticas, rayos X, TAC, secuenciación de ADN, espectrometría de masas y datación de la edad por carbono 14.
- Los principales resultados determinaron que el ADN de los seres no es terrestre. Los estudios estaban publicados en las siguientes páginas web (hoy no disponibles)
- https://www.ncbi.nlm.nih.gov.sra.PRJNA869134
- https://www.ncbi.nlm.nih.gov.sra.PRJNA865375
- https://www.ncbi.nlm.nih.gov.sra.PRJNA861322
“Dos especies desconocidas para la historia moderna”
En un artículo publicado en su cuenta de Facebook, el investigador Federico Monticone afirma: “Un personaje fundamental que podría arrojar luz sobre este asunto es Thierry Jamin, un investigador de origen francés que funge como director presidente del Instituto Inkari – Cusco, una ONG con sede en Cuzco”.
Para Thierry Jamin, los resultados de los análisis son claros: las “momias tridáctilas de Nasca” son efectivamente cuerpos biológicos que estuvieron vivos en un momento determinado de la historia de la humanidad, como lo demuestran las radiografías y escáneres HD realizados a todo el material estudiado. Su datación indica una edad que oscila entre unos mil años (para los cuerpos secos de tipo “reptiliano”), hasta 1.750 años (en el caso de la momia “María”), o incluso casi siete mil años (para los misteriosos “manos” de tres dedos). Los análisis de ADN indican un “origen desconocido” de estos diferentes cuerpos y sugieren la existencia de “dos especies desconocidas para la ciencia moderna”.
“Finalmente, queda definitivamente descartada la hipótesis del fraude moderno”, sentencia Monticone.
Video: Entrevista a Thierry Jamin (2017)
Jaime Maussan descalificado como “charlatán” por otros charlatanes
Un grupo de especialistas de la UNAM descalificó la presentación de los cuerpos en el Congreso y llamó a sus impulsores “charlatanes”. Los “expertos” de la UNAM convocaron a una conferencia titulada una ¿Extraterrestres o esqueletos de llamas? Ante crédulos y charlatanes, la ciencia responde. Físicos, biólogos y una filósofa se reunieron en el Centro de Ciencias de la Complejidad de la UNAM.
El doctor en Física Matemática y anfitrión del evento, Alejandro Frank, dijo hacia el final de la conferencia: “Ante los graves problemas que vivimos en México y en el planeta entero, empezando por el cambio climático, la guerra y las pandemias, es triste reunirnos para hablar de las fechorías de un charlatán profesional”.
Con ese cierre, Frank lo dice todo: es difícil deducir que estemos ante un hombre de ciencia creíble. Perteneciente a la UNAM (alguna vez una gloria académica de América Latina, hoy reducida a templo de la ignorancia con su adhesión a la pseudopandemia, la superstición de los cubrebocas y el alarmismo climático), Alejandro Frank fustigó a Maussan como “conspiracionista” por la presentación de los cuerpos. Pero en la crónica del evento, no se menciona la presentación de ninguna prueba que demuestre que las momias de Nazca son un fraude.
¿Por qué tanto énfasis en desmentir la posible existencia de especies desconocidas, sin evidencias claras en contrario?
Es de destacar que tanto los “expertos” de la UNAM como Jaime Maussan, adhieren a los postulados de la Agenda 2030. En esto coinciden en forma cerrada. En materia de cambio climático, pandemia y Agenda 2030, Maussan se suma a la marea de charlatanes que torturan a las audiencias de todo el mundo. Sin embargo, respecto de la presentación de los cuerpos no humanos de Nazca, no parece sensato que arriesgue su reputación de décadas presentando muñecos de cartón.
El contrataque del ufólogo mexicano sugiere que no le teme a las comprobaciones. Hace pocos días transmitió en su canal un análisis en vivo de la anatomía de las momias de Nazca. Con rayos X y tomografía computarizada, y la asistencia de un cirujano y un notario que certificó el acto, se analizaron los cuerpos presentados en el Congreso mexicano.
Video: Análisis en vivo de los cuerpos biológicos de Nazca
La suma de las evidencias permite entrever que los cuerpos biológicos de Nazca son reales. Un fraude de muñecos de cartón no sobreviviría tantos años, ni sería sostenido por tantos investigadores. El impacto sobre la conciencia planetaria es mayúsculo. Lo dice Federico Monticone: “Las implicaciones de tales noticias, en todos los niveles de la sociedad, son inmensas. Si estas son realmente verdaderas “reliquias”, es posible que algún día sea necesario reescribir toda la historia de los hombres”.