No son los mejores momentos locales/regionales/globales del Estado apartheid/paria/genocida de Israel. A escala local, se decanta la hipótesis de que el premier Netanyahu usa a los rehenes israelíes capturados por la guerrilla palestina sunita Hamas como carne de cañón para su designio mesiánico del “Gran Israel (https://bit.ly/4aLVOfj)” y su “doctrina Amalek (https://bit.ly/47piOzc)”, cuando aún no ha podido derrotar a las dos guerrillas vecinales, la chiíta Hezbolá en Líbano-sur y a Hamas en Gaza, ni a los yemeníes de Ansarolá, mientras bulle Cisjordania.
A escala regional, se asienta la “nueva ecuación (https://bit.ly/49OPHWv)” de la flamante deterrence (del latín: deterrere, disuadir por el terror) estratégica
de Irán (https://bit.ly/4dal68y) que supera ya a la caduca deterrence escatológica
de Israel (https://bit.ly/3Q6MgmUx)”
A Israel sólo le queda su letal deterrence financiera
para intentar doblegar a Irán, según The Jerusalem Post (https://bit.ly/3Wc5j35).
Tampoco se puede soslayar el legendario control de Israel en EU tanto de la Cámara de Representantes con el republicano Mike Johnson como del Senado con el jázaro (https://bit.ly/4bQeMT7) Chuck Schumer, sin contar la columna vertebral jázara de la administración Biden, pese a la salida teatral de la amazona Vicky Nuland –y su clan familiar cabalístico de los Kagan, según Jeffrey Sachs (https://bit.ly/3OGeBin), sobre la anatomía patológica bélica de los neoconservadores straussianos (Party War: el Partido de la Guerra): el asesor de Seguridad Nacional Jacobo Sullivan; el secretario de Estado, Antony Blinken, y la secretaria del Tesoro, Janet Yellen–.
Un asombroso escenario cisne negro
–que otros podrán rechazar porque se trata de un rinoceronte gris
que siempre ha estado ahí, pero ha sido boicoteado por los omnipotentes multimedia controlados por el lobby israelí, y ahora se permea básicamente en Tiktok que el gobierno de Biden y el Congreso desean eliminar– lo constituye la revuelta de estudiantes y profesores en varias universidades prestigiosas de EU: desde la Universidad de Columbia, pasando por el MIT, hasta Tufts University, que se ha expandido como mancha de tinta en todo el país, en protesta contra el genocidio en Gaza y a la criminalización de la sacrosanta libertad de expresión (https://bit.ly/3W6a8Lo). En una maravillosa convergencia del presente con el futuro, los profesores de Columbia declararon su solidaridad con los contestatarios universitarios frente a su presidenta, muy cercana a la globalista anglósfera sionista, Nemat Minouche Shafik (https://bit.ly/3Uy0Y9nx). esposa del financiero Mohamed El-Erian, hijo predilecto del Foro Económico Mundial de Davos.
Los estudiantes propalestinos de la Universidad de Columbia han acampado en protesta al genocidio de Israel y las amenazas del rabino jázaro Elie Buechler, quien aconsejó a los alumnos judíos
de abandonar la universidad por inseguridad, lo cual coincidió con el inicio de la festividad judía del Pesaj (https://bit.ly/3Ubv7d8).
Se han erigido campamentos en las universidades de Columbia, Yale, Michigan, Nueva York, The New School, Tufts, MIT, Emerson College y Rutgers.
Las policías también acudieron a las universidades de Nueva York y Yale (https://bit.ly/4aL4Ysx) para aplacar las protestas propalestinas (https://bit.ly/3w4r6iG).
El futuro ya es presente cuando un grupo de 50 empleados de Google fue expulsado por protestar contra sus servicios con el gobierno israelí: el proyecto Nimbus de mil 200 millones de dólares en servicios de nube
Los universitarios constituyen la llama votiva del futuro hecho presente y adelantan el nuevo ecosistema doméstico de millennials (22 por ciento de la población de EU) que ya rebasó a los baby boomers y será inminentemente la mayoría demográfica de EU, todavía controlado por el lobby israelí en el Congreso, la bancocracia de Wall Street, Hollywood y los multimedia.
Gaza irrumpió en el alma universitaria de EU y adelanta su inevitable futuro (sic) pluscuamperfecto.