La lucha contra la eutanasia alcanzó ayer un nuevo nivel, ya que Fox News publicó un artículo que destapa la naturaleza siniestra de la industria.
La reportera Asra Nomani acaba de publicar un reportaje de investigación en el que detalla el comportamiento depredador de lo que ella denomina «Assisted Suicide Inc».
«Una investigación de Fox Digital revela… los opositores a la eutanasia se enfrentan a un lobby global multimillonario que podría llamarse Assisted Suicide Inc., una red en expansión que cambia leyes en todo el mundo, desarrolla servicios de eutanasia para funerarias, vende ‘cápsulas suicidas’, promueve el ‘turismo suicida’ e incluso forma a ‘doulas para la muerte'», escribe.
El ensayo de Nomani, acertadamente titulado «Daños incalculables»: El movimiento mundial del suicidio asistido se dirige a los niños» es la última noticia de gran repercusión que expone los esfuerzos de las fuerzas favorables a la muerte que quieren extender la eutanasia a los menores. Como señala Nomani en su artículo, existe un creciente «lobby mundial» de grupos que quieren instar agresivamente a los niños a que se suiciden.
¿Quiénes son exactamente estos grupos? «Estos grupos están presentes en todos los continentes, pero predominan en Occidente, que también se enfrenta a unas tasas de natalidad alarmantemente bajas», escribe. Hay 41 grupos en Europa; 31 grupos en Norteamérica, con 25 de ellos en Estados Unidos, cuatro en Canadá y dos en México; 13 en Oceanía, con la mayoría en Australia y uno en Nueva Zelanda; y sólo cinco en Asia, dos en África y tres en Sudamérica».
Nomani recuerda a continuación que Australia, Bélgica, Canadá, Colombia, España, Luxemburgo, Nueva Zelanda, Países Bajos y 11 estados de Estados Unidos permiten actualmente esta práctica perversa. «Pero tres países -Países Bajos, Bélgica y Colombia- han ido más lejos, permitiendo a los ‘menores maduros’ morir mediante suicidio asistido por un médico», añade.
Todo esto es una tendencia profundamente inquietante. Entre otras cosas, revela que la influencia del diablo es cada vez mayor. No se contenta con que los ancianos pongan fin a su vida prematuramente, sino que ahora quiere que también lo hagan los niños.
Esto está claramente en consonancia con otros esfuerzos del diablo en esta época también, a saber, su plan para convencer a los niños a pensar que son en realidad el género opuesto de lo que Dios les hizo ser.
Atacar a los inocentes es una de las cosas más siniestras que puede permitir una sociedad. Pero como recuerda Nomani en su artículo, la Asociación Nacional por los Derechos de los Jóvenes lo está haciendo ahora mismo al utilizar el eslogan «menores maduros» para animar a los menores de 18 años a morir mediante el suicidio asistido por un médico. La Asociación Humanista de Columbia Británica también pide que se permita a los canadienses menores de edad poner fin a sus vidas.
Pero el hecho es que no hay nada «digno» en quitarse la vida. Sencillamente, no tenemos ese derecho. Dios es el autor de la vida, y sólo Él determina cuándo se acaba. Dado que vivimos en una época de incredulidad, no debería sorprendernos que se niegue esta verdad inmutable y que se pongan de manifiesto las consecuencias de hacerlo.











































































