Ante la inminente Fase 3 de la pandemia, el sector Salud tiene listo el Plan de Reconversión hospitalaria en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que contempla 29 unidades exclusivas para atender enfermos graves.
Jalisco será la entidad con más camas disponibles, después de la capital del país. De estas camas en 29 unidades del IMSS, exclusivas para coronavirus, dos están en Jalisco, con 778 camas disponibles.
El Centro Médico Nacional de Occidente contará con 456 camas de hospitalización. Por su parte, la Clínica 110 de Oblatos dispondrá de 322. Sin embargo, el estacionamiento de esta última sería utilizado eventualmente para habilitar 40 camas más.
Será la segunda Entidad con la mayor cantidad de camas disponibles en el país, sólo por debajo de la Ciudad de México, que tendrá mil 089 en seis clínicas para recibir sólo este tipo de casos.
El Plan de Reconversión también considera 155 unidades médicas híbridas para tratar a pacientes de coronavirus y de urgencias.
Registra IMSS capacidad máxima de 23 mil camas para COVID-19
De acuerdo con el Plan de reconversión hospitalaria del Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS), 184 clínicas podrán atender a personas infectadas por coronavirus durante la fase tres en México, con una capacidad máxima de 23 mil camas. Esas unidades médicas son las que tendrán capacidad de hospitalización.
En éstas se incluyen las 29 clínicas de diferentes Entidades del país que atenderán de manera exclusiva a pacientes críticos (con cinco mil 960 camas). Otras 155 clínicas serán híbridas; es decir, la mayor parte del trabajo que realicen será de atención ambulatoria y hospitalaria de los infectados, urgencias generales, subrogarán los servicios de obstetricia y urgencias generales. A su vez, si no es posible el traslado del paciente hospitalizado, continuará su atención en servicios de medicina interna. Y la totalidad de las camas de cirugía y obstetricia serán utilizadas para la reconversión al COVID-19.
De acuerdo con la Secretaría de Salud Federal, a las 29 unidades exclusivas para pacientes graves se sumarán eventualmente otras tres nuevas y cinco de uso temporal (con 440 camas en total). En el caso de estas últimas, en su mayoría se acondicionarán en los estacionamientos de los hospitales del IMSS (como el espacio para autos de la Clínica 110 de Guadalajara, en donde se dispondrán de 40 camas).
El pasado 3 de abril, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo, informó que para atender a estos pacientes se han diferido servicios programados de endoscopías y terapia psicológica grupal. También podrían posponerse consultas de especialidades o cirugías.
Los servicios que no se suspenden son: hemodiálisis, quimioterapias y cuidados intensivos neonatales, entre otros.
En el documento del Plan de reconversión se integran otros 123 hospitales denominados como “No Covid-19”. En éstos se brindará atención obstétrica y pediátrica, de traumatología y ortopedia, alta especialidad en cardiología y oncología, medicina familiar, entre otros servicios.
Reconversión hospitalaria
Toda la capacidad potencial de las unidades médicas del IMSS estará disponible para los pacientes del coronavirus. Sin embargo, las unidades de referencia se reconvierten en su máxima posibilidad, que serán 26; es decir, algunas clínicas se convierten totalmente en “Unidades COVID-19”.
El IMSS informa que en esta etapa se suspenden los servicios programados en su totalidad, pero continúan los servicios urgentes en las unidades de atención híbrida.
También se mantiene la atención gineco-obstétrica y la pediátrica en los hospitales diseñados para tal fin (se subrogan todos los servicios de gineco-obstetricia, de urgencias generales y los quirúrgicos).
La Interacción estratégica en México
“Unidades COVID-19”
- 29 serán 100% para atención de casos del virus (26 hospitales establecidos y tres nuevos).
- 155 serán clínicas híbridas para atención COVID-19 y urgencias.
- “Unidades no COVID-19”
- 51 hospitales de soporte y atención general para urgencias obstétricas y generales.
- 50 clínicas de medicina familiar con atención continua y urgencias.
- 14 para atención obstétrica y pediátrica.
- 5 hospitales para atención de traumatología y ortopedia.
- 3 de alta especialidad en cardiología y oncología.
Fuente: Gobierno federal
Alistan etapa crítica
La fase 3 del COVID-19 se caracteriza por dos elementos. El primero, por la propagación dispersa donde hay ya varios brotes comunitarios que empiezan a conglomerar. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, explicó que se manifiesta cuando en una zona empieza a existir un brote de origen.
El segundo es porque hay una interconexión entre los propios brotes. “En un municipio, en otro y finalmente ya no se puede distinguir cuál es el territorio que aporta los casos porque existen personas que cambian de lugar a lo largo del día entre un sitio y otro… y están vinculadas por cadenas de transmisión”, precisó el funcionario.
Se recuerda que en la fase uno de la pandemia hay decenas de casos de COVID-19. En la fase dos hay centenas. Y en la fase tres suman millares.
El otro elemento es la sobrecarga del sistema de atención médica que se presenta en la fase tres, particularmente en los hospitales, incluyendo las terapias intensivas. “Entonces, el reto principal para la fase tres es asegurar que existe disponibilidad de espacio para la atención”, explicó López-Gatell.
La fase tres se enfrentará en el país con un Sistema Nacional de Salud “muy deteriorado, por años, con décadas de falta de inversión, falta de desarrollo, escasez de médicos, de enfermeras, de instalaciones. Ese era el punto de partida, el reto al que nos enfrentábamos”, lamentó el funcionario.
Se suman los privados
Unión. Para hacer frente a la emergencia sanitaria, el Gobierno federal anunció la iniciativa “Todos juntos contra el COVID-19”, en la que el sector privado dispondrá de tres mil 115 camas para derivar a pacientes del sector público que no estén contagiados del virus. La atención, las medicinas y los estudios serán gratuitos.
De acuerdo con este plan anunciado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, serán 146 hospitales de 27 Entidades los que apoyarán a los que requieran algún servicio que no esté relacionado con la pandemia, con el fin de que en las instituciones públicas dispongan de más camas para atender a los contagiados del COVID-19.
En el Estado están confirmados los hospitales Mac, San Javier y Médica Sur; además, Puerta de Hierro mostró su disponibilidad para integrarse.
Por una cuota mínima al Gobierno, los hospitales privados atenderán a las personas que comúnmente acuden al IMSS, ISSSTE, Instituto de Salud para el Bienestar, Secretaría de Marina y Defensa Nacional. Las camas de los centros privados permitirán atender a unos 12 mil 500 pacientes de partos, hernias, cesáreas, úlceras, endoscopías y algunas urgencias del 23 de abril al 23 de mayo.
Mario González Ulloa, presidente de la Asociación Nacional de Hospitales Privados, subrayó que este convenio es una “unión de esfuerzos” para “contener y mitigar los estragos generados por la pandemia”.
Fuente: El Informador Artículo original