Nuevamente se registraron derrumbes en la carretera federal 200, en su sección sur. La escena fue de infarto para muchos, ya que se vislumbraron gigantescas piedras de una sola pieza que cayeron y taparon parte de la cinta asfáltica.
Protección Civil de Jalisco informó de nuevos derrumbes en la carretera federal 200, en el kilómetro 198, con rumbo a Cabo Corrientes. Maquinaria pesada ya trabaja para remover estas rocas, que por su tamaño podrían haber aplastado un camión de pasajeros o cualquier vehículo.
Este es el riesgo que los viajeros corren. Son rocas que pesan decenas de toneladas, y que durante toda su existencia han estado insertas en las laderas de la montaña, sostenidas por lodo y maleza. Sin embargo, con el paso de las lluvias, el agua reblandeció la tierra y el peso de estas piedrotas cedió ante la gravedad.
La carretera federal 200 está expuesta a cualquier alteración del terreno. Han sido varias las rocas gigantes que ruedan y caen en seco hacia la cinta asfáltica. También pequeñas secciones de cerro.
A los viajeros no se les puede decir otra cosa más que la advertencia de tener los ojos muy bien abiertos y reaccionar a tiempo ante cualquier derrumbe que vean.
Afortunadamente, las únicas afectaciones que lamentar al momento, han sido los retrasos enormes en el viaje de muchos, y enormes filas esperando que se reabra la carretera.
Fuente: Vallarta Opina. Artículo original