Hace unos días en estas páginas del Diario de Vallarta, habíamos sugerido que atrás de la campaña mediática-política sobre los libros de texto gratuito que hoy es la bandera de golpeteo que tiene la oposición contra las políticas implementadas por la 4T, estaban las empresas que habían sido afectadas, no solo económicamente, algo más profundo, les quitaron el control formativo de la población a través de la educación básica impartida por el sistema de enseñanza mexicano.
SEP presenta explicación de los libros de texto
El día de hoy, como lo indicó el presidente de México Andrés Manuel López Obrador la semana pasada, La Secretaría de Educación Púbica encabezada por su titular Leticia Ramírez Amaya, presentó un análisis sobre el contexto que llevó a transformar de fondo la intencionalidad de los libros de texto. Fue Marx Arraiga Navarro, subsecretario de Materiales Educativos, quien explicó que la creación del nuevo modelo llamado Nueva Escuela Mexicana proviene de los cambios al artículo 3°y a la Ley General de Educación hechos por los legisladores, donde colocan, dijo, a la pedagogía crítica como el motor para el nuevo plan de estudios.
El funcionario encargado de la publicación de los libros defendió el tema de las matemáticas, que ha sido uno de las críticas hechas por la oposición hacia los nuevos textos, que está diseminada en todos los libros en proyectos prácticos. Explicó que, entre otras cosas, lo libros de texto dejaron de ser negocio para 4 empresas editoriales, «ya no es presa de la Caniem, sino ahora es el tesoro de la Secretaría de Educación Pública y la herramienta, una de las herramientas principales que va a tener el magisterio para la reivindicación de su labor».
La presentación de los contenidos por parte de la SEP, resultó más que tersa y la foto al final del evento que es la foto de perfil de esta nota, lo ejemplifica.
Qué es la Caniem
La Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana es el sindicato de poderosos empresarios editoriales que facturan alrededor de 10 mil millones de pesos anuales de los cuales las ediciones de educación básica se mantenían como el mercado más vendido, que según sus propios números representan una participación de 50.4 en el volumen de libros y el 46.8% del monto de las ventas.
Según lo dicho por el subsecretario Arriaga Navarro los libros de texto dejaron de ser negocio para 4 empresas editoriales y entonces ¿cuáles son esas 4 empresas?
Sin buscar mucho, una de las empresas que resaltan como proveedores de impresión y edición de libros de texto gratuito es el poderoso grupo Prisa, un conglomerado de empresas mediáticas españolas que entre ellas está la editorial Santillana.
Algunas proveedoras de Canaliteg en tiempos de Peña Nieto.
Si Ud. le rasca un poquito se sorprenderá de la procedencia y naturaleza de esas editoriales que salen a la luz como proveedoras de libros de texto como SM Ediciones que esconden el nombre de Santa María en las siglas SM, «para los marianistas, esta es una manifestación más de su compromiso con los valores evangélicos» dice en su página web.
Las 4 empresas expuestas, 3 de ellas son españolas. Ediciones Castillo pertenece a la editorial inglesa de Macmillan Education.
Entonces, ahora se sabe que en los sexenios anteriores no solo eran empresa editoriales extranjeras que imprimían los libros de texto gratuito sino que, ellas se encargaban de editarlos. Ahora se entiende porque incluían en los libros de texto la historia de la conquista española como un acontecimiento positivo, lo que contrasta con los nuevos textos que incluyen esa parte de la historia como una invasión cruel y sanguinaria donde se describen las atrocidades cometidas contra los indígenas hasta confeccionarlos como crímenes de exterminio de pueblos enteros.
Esto último es quizá el desastre mayor para los ultraconservadores, pues les quita el poder de manipular la realidad además de que los priva de incentivar su ideología.
La campaña de Tv Azeca y Prisa
En la entrega del escrito Libros, recomunismo e ideología, mencionamos que en este mundo nada se mueve sin el poderoso dinero y sugeríamos que en la impresión de los libros se corría dinero suficiente para pagar una campaña mediática extensa e intensa como la que vivimos hoy con voceros, medios de comunicación, partidos políticos y, claro, también gobernadores como el de Jalisco Enrique Alfaro, en el debate sobre los libros de texto.
Quién sabe si el dinero invertido para esta campaña alcance para los togados que tienen una labor fundamental en este conflicto político.
Como una coincidencia, hoy se sabe que pocos días antes de iniciar la campaña en Hechos, el noticiario principal de la cadena de televisión del nefasto empresario Ricardo Salinas Pliego, habían firmado un convenio publicitario entre Televisión Azteca y el Grupo Prisa.
En una nota publicada en el periódico español El País, anunciaba que «el Grupo PRISA, a través del medio deportivo As y el diario EL PAÍS, han llegado a un acuerdo este martes con TV Azteca para mejorar las condiciones publicitarias en sus plataformas. La alianza busca ofrecer a sus socios comerciales las mejores oportunidades de comunicación, bajo una visión transversal. Esta unión de los medios del Grupo Prisa y Azteca Digital ofrecerá a los anunciantes más de 50 millones de visitantes únicos, lo que coloca a la alianza como un referente indiscutible del sector informativo y deportivo.
Los medios de Grupo Prisa se unen de este modo a un acuerdo con TV Azteca, uno de los negocios más sólidos de México, con una oferta de entretenimiento, medios y plataformas relevantes en el país norteamericano. La alianza comercial reúne a otros medios de relevancia en el panorama del entretenimiento y los medios como el argentino Infobae» concluye la nota.
Aunque no mencionan la cantidad de dinero que se pactó en ese convenio, se asume que debió haber habido millones de dólares de por medio, esto por aquello de los problemas financieros que trae encima las empresas del ultraderechista Ricardo Salinas Pliego, que a pesar de tener problemas fiscales y financieros en Estados Unidos y México, él insiste en presumir en la red social X, falso glamour de yates, puros y falsas sonrisas sin faltar los insultos y calamidades que acostumbra a publicar contra la gente que va en contra de sus ideas de «libertad» y la cultura de la meritocracia.