Un lancha rápida desconocida impactó el bote Dragon Fly en la zona de La Cruz de Huanacaxtle y se dio a la fuga. El aviso a las autoridades no permitió identificar la embarcación responsable. Polémica por la seguridad en las marinas de la bahía.
Un incidente marítimo en La Cruz de Huanacaxtle, que no termina de resolverse, despertó la polémica sobre la seguridad de navegar en la Bahía de Banderas. El sábado 26 de febrero, alrededor de las 20.30 hs, en la entrada de la marina de La Cruz, la embarcación Dragon Fly fue impactada por una lancha fuera de borda que se dio a la fuga rumbo a Nuevo Vallarta.
Los pasajeros del Dragon Fly afirman que la lancha que los impactó tenía las luces de cabina encendidas (que dificulta la visibilidad) y la música a todo volumen.
El capitán del bote afectado, intentó denunciar el incidente ese mismo día con las autoridades, pero no había personal en las oficinas. El domingo tampoco se pudo formalizar el trámite por el mismo motivo.
Cuando finalmente se pudo entregar la denuncia el lunes, las autoridades de la marina la desestimaron porque la reglamentación vigente indica que la denuncia debe formalizarse dentro de las 24 hs del incidente.
Los datos del incidente
La denuncia presentada afirma lo siguiente:
«El 26 de febrero navegamos a las 08:30 con 12 amigos de La Cruz a Quimixto para un viaje de un día con la expectativa de estar de regreso a las 19:00 hs. Salimos a las 08.40 horas y en nuestro camino de regreso a las 20.32 horas fuimos golpeados repentinamente por una lancha motora fuera de borda doble en nuestra proa de babor».
«Información detallada de la embarcación: Lancha rápida blanca, de unos 20 pies, con techo rígido y una franja delgada oscura en el costado y montada con dos grandes motores fuera de borda blancos. A bordo de la lancha rápida se observaron dos mujeres y un hombre que controlaban la embarcación».
Polémica: ¿Es seguro navegar por la Bahía de Banderas?
El propietario del bote chocado es un ciudadano canadiense. Sus allegados afirman que los costos de la reparación oscilan en los 20 mil dólares, y se quejan por la actitud de las autoridades de la marina de La Cruz: ¿No deberían tener una guardia permanente para atender incidentes de esta naturaleza? ¿No podrían haber establecido, por una simple consulta de los ingresos y egresos de embarcaciones en cada marina, la identidad de los responsables del incidente?
«No es la primera vez ni será la última», dice una de las pasajeras de aquella noche. «Hay mucha gente que compra su lancha con el permiso incluido, pero no tienen la capacitación para manejarla».
«¿Qué pasa con las autoridades que no salen en auxilio? Las autoridades nunca contestaron el radio el día del incidente. Deben tomar nota de lo que pasó para empezar a hacer lo que deben hacer».
Empresario: «Hay una mucha informalidad en el ambiente»
Un empresario naviero opinó: «Son un problema en la bahía las embarcaciones que no respetan las reglas de navegación. Por ejemplo, las que de noche entran y salen sin luces. Hay mucha informalidad en el ambiente naviero. Pero investigando, preguntando, se podría haber identificado a los responsables».
«Yo creo que es difícil ahora que se pueda obtener un pago por los daños. Pero creo que la autoridad debería hacerse responsable: no puede ser que la autoridad no esté vigilando y controlando, al pendiente de este tipo de incidentes. No se puede esperar a una tragedia, con muertos, para crear las condiciones para que la gente haga las cosas bien», concluyó el empresario.