Los países de todo el mundo no han logrado llegar a un consenso sobre los términos de un tratado que unificaría al mundo en una estrategia contra la “inevitable próxima pandemia”, de acuerdo a The New York Times.
Las deliberaciones, que debían ser un tema central en la reunión de una semana de duración de la Asamblea Mundial de la Salud que comenzó el lunes en Ginebra, tenían como objetivo formal “corregir las desigualdades” en el “acceso a vacunas y tratamientos entre las naciones más ricas y las más pobres” que se “hicieron evidentes durante la pandemia de Covid”.
“Aquellos de nosotros en salud pública reconocemos que otra pandemia realmente podría estar a la vuelta de la esquina“, dijo Loyce Pace, subsecretaria del Departamento de Salud y Servicios Humanos, quien supervisa las negociaciones en su papel de enlace de Estados Unidos con la Organización Mundial de la Salud.
Los negociadores esperaban adoptar el tratado la próxima semana. Pero las reuniones canceladas y los debates conflictivos, a veces sobre una sola palabra, paralizaron el acuerdo en secciones clave, incluido el “acceso equitativo a las vacunas”.
El órgano negociador tiene previsto pedir más tiempo para continuar las discusiones.
“Todavía soy optimista”, dijo el Dr. Jean Kaseya, director general de los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades. “Creo que el continente quiere este acuerdo. Creo que el mundo quiere este acuerdo”, fantaseó.
Roland Driece, copresidente de la comisión negociadora de la OMS para el acuerdo, reconoció el viernes que los países no habían sido capaces de presentar un borrador.
Una vez adoptado, el tratado establecería políticas legalmente vinculantes para los países miembros de la OMS, incluido Estados Unidos, sobre vigilancia de patógenos, intercambio rápido de datos sobre brotes y cadenas locales de fabricación y suministro de vacunas y tratamientos, entre otros.
“Lo intentaremos todo —creyendo que todo es posible— y haremos que esto ocurra porque el mundo sigue necesitando un tratado contra la pandemia”, afirmó Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
La fecha límite de la próxima semana fue autoimpuesta y algunos expertos en salud pública han dicho que era demasiado ambiciosa (la mayoría de los tratados duran muchos años) para una tarea tan compleja. Pero los negociadores estaban luchando por ratificar el tratado antes de las elecciones en Estados Unidos y en varios países europeos.