Si se compara la privatización de las empresas públicas en la época neoliberal con los tres siglos de dominación colonial no fue nada en comparación del periodo de 1982-2018 dice Andrés Manuel López Obrador.
La historia de la época del neoliberalismo se cuenta a partir de las privatizaciones de las empresas públicas que fueron a parar a personas allegadas de Carlos Salinas para conformar el llamado Grupo Compacto que es el que gobernó de facto de 1982 al 2018.
El día de hoy en la tradicional conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador, abordó el tema del saqueo que tuvo México refiriéndose a los empresarios que obtuvieron los beneficios de las privatizaciones de las empresas públicas estratégicas que se acumularon durante el periodo pos-revolucionario.
Al inicio del año de 1982, México se manejaba desde las políticas de una economía mixta, donde el gobierno tenía el control sobre más de 1100 empresas públicas que cubrían actividades estratégicas como el petróleo, petroquímica, minería, telefonía, ferrocarriles, transportes aéreos, química, automotriz, acero, azúcar, banca, comercio, medios de comunicación entre otras actividades vitales de una sociedad.
Gestación
Los inicios de la década de los 80´s del siglo pasado, ya con el gobierno de Miguel de la Madrid, fue la gestación de lo que a la postre se llamó el periodo neoliberal, un estilo importado desde la visión estadounidense de cómo administrar la economía de país.
El modelo de la economía que los Estados Unidos promovía en el mundo, no se trataba de otra cosa más que cambiar la gobernanza, para que no fuera la democracia legítima quien decidiera la forma de gobierno sino el conglomerado de empresas corporativas que, desde una simulación de democracia a modo, ellos decidieran todo.
México como propiedad de unos cuantos
De la Madrid planchó el camino, por decirlo de alguna manera, para que la economía del país, manejada desde el Estado, pasara a manos privadas, cosa que le tocó a Carlos Salinas la elección de esas “manos privadas” al conformar el llamado Grupo Compacto, que al final se apoderaron de México.
Desde ese modelo de gobierno, no es nada extraño que se sintieran los dueños del país y, desde que AMLO apareció como aspirante a la presidencia, tampoco es extraño que lo vieran como la amenaza del “peligro para México”. Ese “México” que ahora, Claudio X González, lo ha manipulado como un mensaje clasista oculto cuando se habla de “Mexicanos” por la Corrupción, “Mexicanos” Primero, Va por “México” y otras nominaciones donde aparece “México”, en clara alusión.
Así, los procesos de privatización, desincorporación le llaman, se dieron en cada uno de los sexenios que conformaron ese periodo, que AMLO le llama “neoporfirismo”, término que pocos entendemos porque es precisamente la historia la que menos le importa saber a la mayoría de la gente.
Recuento sexenal: Las empresas públicas desincorporadas
Con Salinas de Gortari, se “desincorporó” todos la banca comercial, medios de comunicación, telefonía, acero, fertilizantes y la industria automotriz.
Con Zedillo le tocó repartir los más de 25 mil kilómetros de vías de ferrocarril, aeropuertos y Nafinsa, uno de los bancos para el desarrollo; sin olvidar el Fobaproa, que fue como una re-privatización de las empresas que, supuestamente habían quebrado, y se les rescató con dinero público, deuda que todavía estamos pagando los mexicanos.
Con Fox se cuentan las privatizaciones de Aeroméxico, Mexicana, Aseguradora Hidalgo y los puertos del país.
Con Calderón, la compañía de generación de energía eléctrica Luz y Fuerza de México y el grupo azucarero México.
Y finalmente, Peña Nieto que no alcanzó a rematar Pemex pero sí pudo vender muchos áreas de extracción petrolífera tanto en tierra como en aguas someras y profundas.
Todo eso se cuenta sencillo en unos párrafos, pero cada uno de esos episodios son una veta de estudio profundo sobre los actos de saqueo burdo de extremo cinismo.
Ahora, el que fue nombrado “un peligro para México”, sí ha sido en verdad el verdadero peligro para ese grupo de empresas corporativas nacionales y extranjeras que se dicen “México” y, desde todos sus medios y su gran capital, se oponen a todo lo que está haciendo la 4T y el gobierno de López Obrador porque son acciones contrarias a sus privilegios habituados con el PRI o PAN.
Un saqueo como nunca en la historia de México
El día de hoy, el presidente López Obrador, narró pasajes de cómo se llevó a cabo estas privatizaciones de empresas públicas y diferenció que “no estamos en contra de los empresarios, estamos en contra de los traficantes de influencias, estamos en contra de la corrupción. Es que al país lo han saqueado y en sentido estricto, no han sido empresarios, sino traficantes de influencias cercanos al poder”.
López Obrador recomendó leer el libro “Desincorporaciones de entidades paraestatales” editado por el Fondo de Cultura Económica, porque ahí está todo lo que sucedió, dijo.
Aquí el extracto de lo que dijo ↓